Marcos Fidel Barrera Morales
Para María Isabel Sánchez
Las precisiones con respecto al pensamiento sobre holística, en la perspectiva de la filosofía de la ciencia, son necesarias debido, entre
otros aspectos, a dos significativos: la importancia que ha tenido y tendrá en
la vida intelectual, filosófica y conceptual, y por las variadas confusiones
que existen en torno a las reflexiones que se hacen desde distintas fuentes. Si
bien es cierto que en un fragmento como este no se logra atender uno u otro
aspecto enunciado, sí corresponde propiciar ideas sobre esta comprensión de la
ciencia, de lo humano y de la filosofía, susceptible de dar extraordinarios
aportes a la sociedad presente y futura.
Uno de las circunstancias que permite justificar, entender y
explicar el por qué de un pensamiento holista lo tiene el cuestionamiento que se
hace a la ciencia tradicional, en su empeño por fragmentar, por dispersar y por
atomizar, debido al incesante deseo de encontrar el principio rector de la
totalidad, producto de esa herencia cartesiana que la humanidad acusa por
milenios. Otra de las circunstancias, en consecuencia, se debe a la tendencia
de la humanidad de buscar formas completas, amplias y de corte integrativo que
permitan profundizar en el conocimiento de cualquier cosa. Esta circunstancia
ha producido la comprensión de que lo que ampara la particularidad, es la
totalidad, pues cualquier evento expresa y se debe a la totalidad, pero dicho
evento nunca ni es la totalidad ni la trasluce, completamente. Así que el
camino sigue siendo la particularidad, pero ahora con atención a aquello a lo
que la particularidad remite: la totalidad. Esto abre varios caminos de
conjugación entre lo predecible y lo impredecible, lo conocido y lo desconocido,
lo probable (prognosis), lo posible (proferencia) y lo imposible (prospectiva)…
La atención de la eventualidad, advertida a través de la
conjunción de variables y el recurso gestáltico explicativo, diversos autores
lo han planteado como principio holográfico u hologramático (Einstein, Bohm,
Prigogini, Talbot, Briggs, Peat, Weil, Hawking, Barrera, otros). Cualquier
hecho, circunstancia, eventualidad sólo es indicio de la condición holista de
la naturaleza, de las cosas y de todo cuanto se constituye como su expresión,
porque –se insiste- cualquier indicio lo es de relaciones, en el contexto de la
totalidad. En este momento es preciso advertir que uno de los errores que se
presentan a la hora de juzgar el pensamiento holista, viene de una falsa
interpretación de este principio –el holográfico-, pues se acusa a la holística
de ser totalitarista porque en nombre de un hol-ismo (que no es holística) se
plantea una particularidad como totalidad –holismo-, como es el caso del
totalitarismo político, o el del absolutismo ideológico o el del monismo metodológico,
donde un aspecto se yergue como expresión de totalidad, y se abroga la
totalidad misma. Pues no, la holística ni ampara ni milita en esta tendencia,
pues entiende que tales posturas, -absolutistas, hegemónicas, totalitaristas y
afines- son necesariamente sectarias, segmentarias, excluyentes, y además conducen
a la fragmentación, a los reduccionismos y a los sometimientos innecesarios e
injustificados, cuando no a una simple sinécdoque. Se trata, entonces, como ya
se ha expuesto, la aprehensión holista, de una condición, actividad, gestión y
propósito que expresa la totalidad, en cada eventualidad (particularidad), más dicha
eventualidad no es la totalidad, más sí la pone en evidencia, por lo que mal
resulta presentar de alguna manera esa particularidad como totalidad…
El pensamiento holista apenas comienza a desarrollarse.
Corresponde a científicos, intelectuales, profesionales de distintas
disciplinas y ciencias, la tarea de advertirlo y, en consecuencia, de elaborar las
precisiones semánticas, filosóficas conceptuales, algor
ítmicas y matemáticas, correspondientes. Con una certeza de por medio:
cualquier cosa que se diga, cualquier afirmación que se haga tan sólo lo será
como expresión de acercamiento y de orientación hacia algo que trasciende lo
dicho. Porque así es el pensamiento holístico: afirmación de ideas, principios
y exposición de maneras, todo, como señal de lo que está por conocerse, de lo
que está por saberse, de la ciencia que está por sucederse, con rasgo de
continuidad y asomo de trascendencia.
Caracas,
noviembre de 2013
Libros sugeridos:
Barrera Morales, Marcos Fidel. 2010. Holística. Caracas-Bogotá: Quirón.
Weil, Pierre. 2000. Holística. Bogotá: Paulinas.
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